Pedagogía de la Memoria

Creemos que la Pedagogía como señala Inés Dussel, no debe ser pensada como un camino o como el mejor modo de trabajar las estrategias más eficaces de transmisión de las memorias del pasado reciente, sino más bien, que la pedagogía debe ser un ejercicio de análisis de los discursos y las prácticas sociales que están disponibles, que circulan, nos rodean como sujetos y actores sociales del presente; y nos muestran cómo estamos atravesados por lo dominante, y al mismo tiempo cómo somos otro distinto que lo dominante. Es así que, evidentemente, no hay una única Memoria sino memorias en plural, que son objeto de disputa política, cultural, histórica y social donde los individuos, los grupos, las instituciones participan y construyen sentidos e interpretaciones que nunca son definitivas ni se clausuran. Es decir, se delinean en el marco de luchas y de relaciones de fuerza, que mutan y se transforman a lo largo del tiempo histórico, cristalizando en algunos momentos en relatos que logran grados de legitimidad social.

lunes, 24 de octubre de 2011

28 de octubre en San Miguel - Balance del Programa y proyección de 'Madres'


Dirección Provincial de Educación Superior y Capacitación Educativa
Dirección de Educación Superior

Jornada “Memoria, Verdad y Justicia en la Educación Superior”

Balance de gestión del Programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico.
Presentación de
la película documental "MADRES".
El programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico celebra sus 6 años de trabajo presentando la película documental Madres, junto a su director, madres de Plaza de Mayo (Línea Fundadora) y autoridades de la Dirección Provincial de Educación Superior. La jornada se realizará realizará el viernes 28 de Octubre en el Instituto Superior de Formación Docente N° 112 de San Miguel. Durante la Jornada se exhibirán producciones de los Institutos Superiores de Formación Docente y Técnica realizadas en el marco del programa y como resultado de la línea de acción sobre memoria que promueve la Dirección de Educación Superior en sus políticas de jerarquización académica y democratización del nivel.
El programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico promueve la apertura y profundización de espacios de formación, discusión académica y socialización de saberes y experiencias sobre la construcción del sentido pedagógico del pasado reciente, sus consecuencias, los relatos y memorias acerca de ese pasado reciente, la defensa de los derechos humanos durante la democracia y las perspectivas históricas de participación de todos los actores sociales y educativos en esta transformación, en el horizonte de un proyecto histórico nacional y popular.
A 35 años del último golpe cívico militar, la Dirección de Educación Superior promovió la reflexión sobre el pasado reciente en los Institutos Superiores de Formación Docente y Técnica a través de diversas instancias de formación, capacitación y distribución de recursos, como la entrega gratuita de la película Madres.
La presentación oficial de la película para el Nivel de Educación Superior contará especialmente con la presencia Eduardo Walger, director de la película, Nora Cortiñas y Taty Almeida, Madres de Plaza de Mayo (Línea fundadora). Asimismo, en un manifiesto acto de homenaje de los docentes y estudiantes de educación superior a los 30.000 desaparecidos y a las Madres los Institutos contarán con un espacio para compartir el trabajo que vienen realizando desde el 2006 hasta la fecha en el marco del programa, como un aporte a la construcción de una memoria, basada en la verdad y la justicia.
Información general:
• Fecha: 28 de Octubre de 2011
• Horarios de la presentación de la película: 18:00 hs.
• Horarios de la muestra: 13:00 a 18:00 hs.
• Lugar: ISFD N° 112 – Argüero 1138 - San Miguel.
• Inscripción: hasta el 26 de Octubre (ver ficha para inscripción)
• Inscripción para el montaje de la muestra: hasta el 26 de Octubre (ver ficha para
muestra)
Contacto:
Programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico
Dirección de Educación Superior
Dirección Provincial de Educación Superior y Capacitación Educativa
Teléfono: (221) 429 5313
Correo electrónico: contra_elolvido@yahoo.com.ar

sábado, 3 de septiembre de 2011

Comienza el juicio por "La noche de los lápices"

El lunes 12 de setiembre próximo empezará en esta capital el juicio oral y público a 26 ex miembros de la dictadura, entre ellos un ex gobernador.

LA PLATA.- El lunes 12 de setiembre próximo empezará en esta capital el juicio oral y público a 26 ex miembros de la dictadura, entre ellos un ex gobernador, acusados de los crímenes perpetrados en la "Noche de los Lápices", en el "Caso Graiver" y del secuestro del periodista del diario "La Opinión" Jacobo Timerman, entre otros hechos, informaron hoy fuentes judiciales.

El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata encabezará el proceso al ex jefe de Investigaciones de la Policía Bonaerense, Miguel Etchecolatz -que ya cumple condena a prisión perpetua-, el ex médico policial Jorge Bergés, el ex policía Hugo Guallama y el ex gobernador bonaerense de facto Ibérico Manuel Saint Jean, más otros 22 acusados.

Todos ellos están imputados en el expediente judicial denominado "Circuito Camps", que incluye a 280 víctimas en los hechos ocurridos en los centros clandestinos de detención conocidos como "Comisaría Quinta", "Brigada de Investigaciones de La Plata", "Arana", "Puesto Vasco" y "COTI Martínez".

Se ventilarán los casos conocidos como "Noche de los Lápices", el secuestro de diez estudiantes secundarios que reclamaban por el boleto estudiantil en La Plata y la desaparición de seis de ellos en setiembre de 1976, y el "Caso Graiver", referido al secuestro de varios familiares y empleados del banquero David Graiver en marzo de 1977.

También figura el secuestro de Timerman -fundador del diario "La Opinión" y la revista "Primera Plana" y padre del actual canciller, Héctor Timerman-, quien estuvo detenido en los centros clandestinos de Puerto Vasco y COTI Martínez y fue liberado en 1980, tras lo cual se exilió en Israel y Estados Unidos.

También se juzgará el secuestro del albañil y militante peronista Jorge Julio López, quien se encuentra desaparecido desde 2006 luego de que declaró como testigo en el juicio contra Etchecolatz.

Saint Jean fue gobernador de la provincia durante la dictadura y quien dijo: "Primero mataremos a todos los subversivos, luego mataremos a sus colaboradores, luego a sus simpatizantes, luego a quienes permanezcan indiferentes y por último mataremos a los indecisos".

También será juzgado Jaime Lamont Smart, ex ministro de Gobierno de Saint Jean, en un proceso en el que declarará más de un centenar de testigos.

La lista de acusados se completa con el ex coronel del Ejército que era subjefe de la policía de la provincia, Rodolfo Campos; el ex jefe de la Unidad Regional de La Plata Horacio Elizardo Luján, y los ex jefes de la Brigada de Investigaciones de La Plata Rubén Oscar Páez y Pedro Antonio Ferriole, entre otros policías.

miércoles, 24 de agosto de 2011

JUAN CABANDIE DIO SU TESTIMONIO COMO NIETO RECUPERADO EN EL JUICIO POR ROBO DE BEBES

“Era muy violento conmigo y la familia”

El legislador porteño detalló el vínculo con su apropiador Luis Falco, que lo maltrataba, la relación con Samuel Miara, otro represor que se apropió de los mellizos Reggiardo Tolosa. Cabandié nació en la ESMA y sus padres continúan desaparecidos.

Por Alejandra Dandan

“Una catarata de lágrimas”, dijo Juan Cabandié cuando dejó la sala de audiencias. La emoción se desborda en algún momento y el tribunal se ve obligado a pasar a un cuarto intermedio para dejar un poco de espacio a esas lágrimas. A Cabandié le habían preguntado por el secuestro de sus padres y cuando empezó a explicarlo, tuvo que parar. Antes había dicho algo sobre lo que volvió a insistir en el tramo final, la necesidad de encontrar alguna lógica, esta vez para su propio secuestro: “La necesidad de estas familias que con instrumentos ilegales han hecho uso de la autoridad transitoria al haber robado bebés, estaban satisfaciendo un vacío existencial o vacío familiar, que quizá se producía en algunas. Es el caso de (Luis) Falco”, explicó. “A partir de que pierden un bebé antes de nacer o durante el mismo nacimiento, tienen la necesidad de completar la familia con un estándar de familia tipo, de ser cuatro integrantes, y toman la decisión de apropiarse de un bebé ajeno. Y el lugar de poder y la impunidad los llevaba a agarrar chicos nacidos en centros clandestinos.”

Juan Cabandié declaró en la audiencia por el plan sistemático de robo de bebés. Los integrantes del Tribunal Oral Federal Nº 6 abrieron el debate con las preguntas del protocolo. Cuando le pidieron la fecha de su nacimiento, Cabandié hizo una pausa y dijo “20 de marzo de 1978”. Cuando la presidenta del tribunal, María del Carmen Roqueta, le preguntó, en cambio, si tenía pleitos pendientes con los acusados, se apuró en recordarle los datos del expediente: “Yo he nacido en la ESMA, como consta en la causa; mi madre ha sido secuestrada y me tuvo en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada, ex ESMA, a mediados de 1978”. En las dos horas siguientes, presentado a sí mismo como diputado de la Ciudad de Buenos Aires, Cabandié volvió a entrar a la casa donde vivió convencido de que era hijo del policía de Inteligencia Luis Falco. “Donde yo estaba al borde de dar saltos de rana a la mañana, para ejemplificar la manera en la que se manejaba ésa que era una relación tortuosa y especialmente violenta.” Una familia a la que llegó a ocupar el lugar del niño muerto. Un lugar donde supo que Falco se infiltró entre las Madres de Plaza de Mayo y celebró porque lo equiparaba con los marinos. Y el lugar donde él pronunció alguna vez el nombre de Néstor Kirchner para enfrentar a Falco, cuando dejó la casa de Abuelas de Plaza de Mayo con alguna certeza sobre sus análisis genéticos y su apropiador lo llamó, por primera vez preocupado, para preguntarle si alguien más sabía algo. “Denotaba una especie de temor que no era habitual en él –dijo Cabandié–. Sí era habitual en mí porque yo le tenía mucho miedo, y por el miedo que tenía se me ocurre responderle que sabían Estela Carlotto y Néstor Kirchner. Estela lo sabía de alguna manera, porque mi denuncia estaba en Abuelas. Kirchner obviamente no lo sabía, yo no lo conocía, pero para mí era como una mano de protección, pensaba que nos iba a ayudar a nosotros, y él se asustó más.”

Hubo dos momentos singulares del relato. Uno, compartido con los jóvenes apropiados y restituidos que declaran en el juicio, que es el momento en el que entran y logran mostrar las condiciones domésticas y, entonces, más íntimas de la apropiación. El modo en el que funcionaron aquellas supuestas familias. El otro, la reconstrucción de la historia de sus padres, detalle a detalle, desde la lógica de las biografías políticas.

El relato

“¿Cuándo supo que Damián Cabandié y Alicia Alfonsín eran sus padres?”, le preguntó al comienzo el fiscal Martín Niklison. “De esto me entero el 26 de enero de 2004 –dijo Cabandié–, a partir de que yo me acerqué a Abuelas de Plaza de Mayo, a mediados de 2003, por distintas dudas con relación a mi filiación, en situación de inestabilidad emocional por no tener respuestas a muchas preguntas, por el maltrato que me prodigaba la persona que era mi padre. Y porque ningún argentino es ajeno a lo que sucedió entre 1976 y 1983.”

En esa casa, Cabandié era Mariano Andrés Falco, supuesto hijo de Falco y de Teresa Perrone y hermano menor de Vanina, la persona que lo acompañó más tarde en toda la búsqueda. Con Falco había “una relación tortuosa”, dijo él. “Era una relación mala, no así con Teresa. Yo lo dejo de ver a los 19 años, cuando se divorcia. No lo veo más. Era muy violento, muy autoritario, ejercía violencia sobre la familia, o ese supuesto núcleo familiar, aunque era especialmente violento conmigo, a partir de travesuras como las de cualquier chico: se agarraba de esos elementos para ejercer la violencia hacía mí.”

Falco estuvo en Inteligencia de la Policía Federal. El padre fue comisario general y su hermano sigue en actividad dentro de la fuerza. Tenía un trabajo de visitador médico como cobertura. Cabandié cree que llegó a sus manos por la relación con el represor Samuel Miara –parte de las patotas del Atlético, el centro clandestino por donde pasaron sus padres–, apropiador de los mellizos Reggiardo Tolosa y a quien Juan llamaba “tío”. Cabandié está convencido de que, por jerarquía y relación de mandos, Miara le permitió a Falco obtenerlo de adentro de la ESMA. A los 8 o 9 años, Cabandié vio en televisión las fotos de los mellizos Matías y Gonzalo buscados en llamados solidarios. Preguntó, le dijeron que era un error, pero él se guardó las dudas porque hacía tiempo que no los veía. Dos o tres años después volvió a ver fotos en televisión, esta vez con pedido de paradero. Falco viajó a Paraguay para ver a Miara. En 1989 extraditaron a Miara. Cabandié dijo que, en ese momento, Falco le dijo que Miara había hecho “una gran obra de amor con los mellizos” porque, cuando nacieron, estaban muy flaquitos: “Siendo mellizos, habiendo nacido en la comisaría de La Plata y con su madre torturada –explicó–, no es descabellado pensarlo”.

Pese a la supuesta clandestinidad de las actividades de Falco, en algún momento el represor empezó a construir relatos de lo que hacía, “despojado de cualquier resguardo”. Les hablaba de los allanamientos, de los operativos, de los discos y guitarras, jactándose por haberlos robado en los operativos. Le causaba gracia haberse infiltrado como operario del subte y que lo hayan descubierto. Les contó que usó un seudónimo para infiltrarse en el Mundial ’78. Les mostró una credencial a nombre de Leonardo Fajardo, “que hace alusión a la personalidad”. No hace mucho, Cabandié supo además que había vendido un departamento. Una militante de aquellos años lo contactó para contarle que le había comprado ese lugar a Falco. Que cuando vio la casa le llamaron la atención las imágenes de policía en las paredes y dos niños que jugaban con cara de tristes.

En la sala, Roqueta seguía la declaración con los jueces Julio Panelo y Domingo Altieri. En el fondo, entre el público, estaba la plana mayor de La Cámpora. Niklison seguía con las preguntas. Cabandié habló entonces del Nunca más. “Cuando yo empiezo a tener curiosidad sobre cuestiones de la vida, veo que llamativamente había un libro Nunca más en la casa. Había otros libros. Había libros de formación militar. Que no tenía nada de malo que sean de formación militar, pero había un libro explícitamente antipopular, con reivindicaciones de vejaciones y torturas.” Para entonces tenía 15 años. Leyó los nombres de los amigos de Falco, entre ellos del filonazi Jorge Vieira: “Leerlo me acercó a tener otra mirada, no me asombré de que apareciera explícitamente como filonazi fascista sino leerlo en un libro me llamó poderosamente la atención y empecé a darle más importancia a esa posición diferente”.

Cuando Cabandié empezó a hablar de sus padres, Roqueta ordenó un cuarto intermedio. Fue la primera vez en la que tuvo que dejar de hablar. “Mis papás desaparecen el 23 de noviembre del ’77 –dijo–. En ese momento, la organización política a la que pertenecían había tomado la decisión de iniciar el pasaje a la clandestinidad. Es decir, apartarse de los lugares de origen; mis padres eran muy jóvenes, tenían 16 y 19 años, estaban casados hacía un año.” Ellos vivían en Congreso, en la calle Solís, muy cerca del Departamento Central de Policía; primero fue secuestrado su padre, cuando salía de ENTel; y después su madre, cuando salía de un almacén. Más tarde habló de la ESMA, de su nacimiento, de los 15 o 20 días que estuvo con su madre. Del momento en que lo llamó sólo Juan, porque era un nombre simple. De la carta que le obligaron a escribir cuando estaba convencida de que a su hijo no lo iban a devolver a la familia. Aunque al final siguió con ellos. Pero esta vez habló de la vida cuando Roqueta le preguntó por las identidades políticas. Damián estuvo en la UES, antes del golpe se incorporó a la unidad básica Beto Simona, parte de la estructura de Montoneros. Con el pasaje a la clandestinidad, las actividades se trasladaron al Club Social Teodoro García, donde se conoció con Alicia. Tuvieron una militancia activa en la Villa General Mitre, que era la villa más grande de la ciudad de Buenos Aires, dijo Cabandié. La villa estaba en Colegiales, en el espacio que ahora ocupan la Plaza Mafalda y el Mercado de Pulgas. De su padre sabe que era el que más hacía pintadas; su madre, en cambio, estaba en el barrio.

Página 12 - 24/08/2011

martes, 23 de agosto de 2011

Jornada Regional de Pedagogía de la Memoria en Balcarce

Programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico

Fecha: viernes 16 de septiembre de 2011
Instituto sede: ISFD N° 32 de Balcarce
Título: «Memoria, educación y juventud: los lápices siguen escribiendo”

Fundamentación

El programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico de la Dirección Provincial de Educación Superior y Capacitación Educativa en febrero del presente año organizó las Jornadas de “Evaluación 2010 y Planificación 2011” en el marco de las políticas participativas y de jerarquización académica del nivel superior y democratización de los Institutos Superiores de Formación Docente y Técnica.
Estas jornadas contaron con la participación de docentes y estudiantes de los Institutos, permitieron evaluar las intervenciones anteriores del Programa, establecieron las prioridades en cada uno de los Institutos participantes y proyectaron una agenda pedagógica acorde con las expectativas generales.
En este sentido, se propuso realizar la Jornada Regional «Memoria, educación y juventud: los lápices siguen escribiendo» en la ciudad Balcarce. Dicha jornada retoma la apertura y profundización de estos espacios de formación, discusión académica y socialización de saberes y experiencias sobre la construcción del sentido pedagógico del abordaje pasado reciente que se vienen realizando desde el año 2006.
La relevancia temática, a cumplirse un nuevo aniversario de “la noche de los lápices” permitirá reflexionar sobre el pasado reciente en el presente, a través de los ejes de memoria, educación y juventud. A su vez, permitirá abordar ejes pedagógicos centrales de la actual reflexión en el Nivel Superior y revisar, desde el enfoque del Programa, la temática de Juventudes y su relación con los derechos humanos, específicamente con los derechos de la niñez, la adolescencia y la juventud.
Por estos motivos, se propone una Jornada Regional destinado a la comunidad académica del Nivel Superior de la zona centro de la provincia que comprende las Regiones 17, 18, 19, 20, 21, 22 y 25. El Encuentro se realizará en una jornada de trabajo en las modalidades de paneles de especialistas, talleres y cine debate.

Objetivos

• Promover el debate académico y político sobre la Pedagogía de la memoria vinculada a la educación y la juventud.
• Facilitar la apertura de espacios para la reflexión local y regional sobre el pasado reciente a través del abordaje pedagógico de la “noche de los lápices”
• Generar un espacio de formación político académico que aporte a la revalorización y jerarquización de la educación superior.

Agenda
A confirmar: conferencia, muestra de libros prohibidos durante la dictadura, talleres, acto por la noche de los lápices.

Programa Pedagogía de la Memoria y Proyecto Histórico
Dirección de Educación Superior
Dirección Provincial de Educación Superior y Capacitación Educativa
Teléfono: (0221) 429 5313
Ingresar a Pedagogía de la Memoria

domingo, 3 de abril de 2011

Belgrano - La película en el anfiteatro del Museo Histórico


La Subsecretaría de Cultura de nuestra ciudad nos invita a presenciar la proyección de Belgrano - La película, el próximo viernes 8 de abril a las 19:30, en el anfiteatro del Museo Histórico Municipal.
Es una excelente ocasión para encontrarnos y que la experiencia de ver este filme sea un ejercicio de memoria compartida. (Se aconseja llevar reposera o banquito)

Trailer:


Sinopsis:

El telefilme Belgrano se centra en los últimos diez años de vida del creador de la bandera argentina.

En 1810 Manuel Belgrano cree que es posible reemplazar la autoridad real – la de Fernando VII prisionero de las tropas napoleónicas – por la de una comunidad de hombres virtuosos que, identificados con la Patria, interpreten con fluidez al pueblo. Esa convicción guía la práctica política y militar de Belgrano, que lo muestra animado y confiado. Luego llegarán las batallas ganadas, las derrotas, el desencanto, la indisciplina, y el replanteo permanente de sus fuerzas y de sus aptitudes para continuar con la gesta.

Este telefilme cuenta cómo la vida personal de Belgrano quedó rezagada a su vida pública y cómo su virtud patriótica lo obligó a postergar lo privado, sinónimo de pasión individual. Por eso sus amores ocuparon un segundo lugar, recatado, un tanto invisible a los ojos de los demás.

El final, ineludible, termina por resolverse en su cuerpo, espacio privado por excelencia, pero que también parece ser la metáfora de cierta decepción política en aquellos años de la revolución.

Belgrano, la película. Es una coproducción de la TV Pública Canal 7 y Canal Encuentro, auspiciada por el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), realizada por 100 Bares Producciones y apoyada por el Ente Cultural de Tucumán, el gobierno de Tucumán, el Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los DDHH, la Universidad Nacional de San Martín, el Ministerio de Educación de la Nación, la red educar y RTA (Radio y Televisión Argentina).

domingo, 13 de marzo de 2011

LA INDEPENDENCIA ES OTRO NOMBRE DE LA DIGNIDAD - Eduardo Galeano

Días atrás, el 22 de Febrero, para ser más precisos, Eduardo Galeano recibió de manos de Marcelo Ebrard, jefe de Gobierno del Distrito Federal de México el Diploma de Honor y Medalla 1808 en reconocimiento a su trayectoria. En una ceremonia realizada en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el autor de Las venas abiertas de América Latina mostró su gratitud con México y manifestó su solidaridad con el país ahora que esta tierra entrañable es víctima de la hipocresía del narcosistema universal, donde unos ponen la nariz y otros los muertos, y unos declaran la guerra y otros reciben los tiros. A continuación, sus palabras:
Quiero dedicar este homenaje a la memoria viva de dos Carlos: Carlos Lenkersdorf y Carlos Monsiváis, amigos muy queridos que ya no están, pero siguen estando.

Y empiezo por decir gracias: Gracias, Marcelo, por este regalo, esta alegría. Te digo gracias en nombre propio y también en nombre de los muchos sureños que jamás olvidarán su gratitud a México, el país de su exilio, refugio de perseguidos en los años de mugre y miedo de nuestras dictaduras militares.

Y quiero subrayar que México merece, por eso y por muchos otros motivos, toda nuestra solidaridad, ahora que esta tierra entrañable está siendo víctima de la hipocresía del narcosistema universal, donde unos ponen la nariz y otros ponen los muertos, y unos declaran la guerra y otros reciben los tiros.

Este acto generoso me honra por venir de quien viene. La ciudad de México está a la vanguardia en la lucha por los derechos humanos, en un amplio abanico que va desde la diversidad sexual hasta el derecho a respirar, que ya parecía perdido.
Y mucho me honra recibir esta ofrenda, porque mucho tiene de desafío: en nuestros países la independencia plena es todavía, en gran medida, una tarea por hacer, que nos convoca cada día.

En la ciudad de Quito, al día siguiente de la independencia, una mano anónima escribió en una pared: Último día del despotismo y primero de lo mismo.
Y en Bogotá, poco después, Antonio Nariño advertía que el alzamiento patriótico se estaba convirtiendo en baile de máscaras, y que la independencia estaba en manos de caballeros de mucho almidón y mucho botón, y escribía: Hemos mudado de amos.
Y el chileno Santiago Arcos comprobaba, desde la cárcel:

Los pobres han gozado de la gloriosa independencia tanto como los caballos que en Chacabuco y Maipú cargaron contra las tropas del rey.

Todas nuestras naciones nacieron mentidas. La independencia renegó de quienes, peleando por ella, se habían jugado la vida; y las mujeres, los analfabetos, los pobres, los indios y los negros no fueron invitados a la fiesta. Aconsejo echar un vistazo a nuestras primeras Constituciones, que dieron prestigio legal a esa mutilación. Las Cartas Magnas otorgaron el derecho de ciudadanía a los pocos que podían comprarlo. Los demás, y las demás, siguieron siendo invisibles.

Simón Rodríguez tenía fama de loco, y así lo llamaban: El loco. Decía locuras, como éstas:
Somos independientes, pero no somos libres. La sabiduría de Europa y la prosperidad de los Estados Unidos son, en nuestra América, dos enemigos de la libertad de pensar. Nuestra América no debe imitar servilmente, sino ser original.

Y también:

Enseñemos a los niños a ser preguntones, para que se acostumbren a obedecer a la razón: no a la autoridad como los limitados, ni a la costumbre como los estúpidos. Al que no sabe, cualquiera lo engaña. Al que no tiene, cualquiera lo compra.

Don Simón decía locuras, y hacía locuras. Allá por mil ochocientos veinte y pico, sus escuelas mezclaban a los niños y a las niñas, a los pobres y a los ricos, a los indios y a los blancos, y también unían la cabeza y las manos, porque enseñaban a leer y a sumar, y también a trabajar la madera y la tierra. En sus aulas no se escuchaban los latines de sacristía y se desafiaba la tradición del desprecio por el trabajo manual. Poco duró la experiencia. Un clamor de indignadas voces exigía la expulsión de este sátiro que ha venido a corromper a la juventud, y el mariscal Sucre, presidente del país que ahora llamamos Bolivia, le exigió la renuncia.


A partir de entonces, anduvo a lomo de mula, peregrinando por las costas del Pacífico y las montañas de los Andes, fundando escuelas y formulando preguntas insoportables a los nuevos dueños del poder:

Ustedes, que imitan todo lo que viene de Europa y de los Estados Unidos, ¿por qué no les imitan la originalidad, que es lo más importante?

Este viejo vagabundo, calvo, feo y barrigón, el más audaz y el más querible de los pensadores de América, estaba cada día más solo, y solo murió.
A los ochenta años, escribió:

Yo quise hacer de la tierra un paraíso para todos. La hice un infierno para mí.
Simón Rodríguez fue un perdedor. Según la escala de valores de este mundo, que sacraliza el éxito y no perdona el fracaso, los hombres como él no merecen memoria.
Pero, ¿acaso no está vivo don Simón en la energía de dignidad que hoy recorre nuestra América de norte a sur? ¿Cuántos hablan por su boca, aunque no lo sepan, como hablaba en prosa aquel personaje de Molière que no sabía que hablaba en prosa?
¿Acaso don Simón no nos sigue enseñando, un siglo y medio después de su muerte, que la independencia es otro nombre de la dignidad? Es verdad que todavía pesa, y mucho, la herencia colonial, que aplaude la copia y maldice la creación y admira, como denunciaba don Simón, las virtudes del mono y del papagayo. Pero también es verdad que son cada vez más los jóvenes que sienten que el miedo es una cárcel humillante y aburrida, y libremente se atreven a pensar con sus propias cabezas, sentir con sus propios corazones y caminar con sus propias piernas.

Yo no creo en Dios, pero sí creo en el humano milagro de la resurrección. Porque quizás se equivocaban aquellos dolientes que se negaban a creer en la muerte de Emiliano Zapata, y creían que se había marchado a Arabia en un caballo blanco, pero sólo se equivocaban en el mapa. Porque a la vista está que Zapata sigue vivo, aunque no tan lejos, no en las arenas de Oriente: él anda cabalgando por aquí, aquí cerquita nomás, queriendo justicia y haciéndola.

Y fíjense ustedes lo que ha ocurrido con otro perdedor, José Artigas, el hombre que hizo la primera reforma agraria de América, antes que Lincoln y antes que Zapata.
Hace casi dos siglos, él fue vencido y condenado a la soledad y al exilio. En años recientes, la dictadura militar del Uruguay le erigió un ampuloso mausoleo, queriendo encerrarlo en cárcel de mármol. Pero cuando la dictadura intentó decorar el monumento con algunas de sus frases, no encontró ninguna que no fuera subversiva. Ahora el mausoleo tiene fechas y nombres de batallas, y ninguna frase. Involuntario homenaje, involuntaria confesión: Artigas no es mudo, Artigas sigue siendo peligroso.
Cosa curiosa: con tantos vivos que hablan sin decir, en nuestras tierras hay muertos que dicen callando.

Bienaventurados sean los perdedores, porque ellos cometieron la insolencia de amar a su tierra, y por ella se jugaron la vida. Pero está visto que el patriotismo es el honorable privilegio de los países dominantes: sólo los que mandan tienen el derecho de ser patriotas. En cambio, los países dominados, condenados a obediencia perpetua, no pueden ejercer el patriotismo, so pena de ser llamados populistas, demagogos, delirantes: nuestro patriotismo se considera una peste, peste peligrosa, y los amos del mundo, que nos toman examen de Democracia, tienen la mala costumbre de conjurar esta amenaza a sangre y fuego.

Bienaventurados sean los perdedores, porque ellos se negaron a repetir la historia y quisieron cambiarla.

Bienaventurados sean los perdedores, y malditos sean quienes confunden el mundo con una pista de carreras y lanzados a las cumbres del éxito trepan lamiendo hacia arriba y escupiendo hacia abajo.

Bienaventurados sean los indignados, y malditos sean los indignos.
Maldita sea la exitosa dictadura del miedo, que nos obliga a creer que la realidad es intocable y que la solidaridad es una enfermedad mortal, porque el prójimo es siempre una amenaza y nunca una promesa.

Bienaventurado sea el abrazo, y maldito sea el codazo.

Sí, pero… Cuántos perdedores, ¿no?

Cuando algún periodista me pregunta si soy optimista, yo contesto, sinceramente:
A veces. Depende de la hora.

Siempre me parecieron más bien inhumanos los optimistas full time.

Creo que el desaliento es un derecho humano, y de algún modo es también la prueba de que somos humanos, porque no sufriríamos el desaliento si no tuviéramos aliento.
Hay que reconocer que no es muy alentadora la realidad, que tiene la jodida costumbre de recompensar a los exprimidores del prójimo y a los exterminadores de la tierra, el agua y el aire. Y en cambio, las más apasionantes aventuras de transformación de la realidad suelen quedarse a mitad de camino, o se extravían y se pierden, y muchas veces terminan mal.

Hay que reconocerlo, digo, pero también cabe preguntar: Cuando esas lindas experiencias colectivas terminan mal, ¿de veras terminan? ¿No hay nada que hacer, sólo nos queda resignarnos y aceptar el mundo tal cual es, como si fuera destino? Hace pocos años, se puso de moda la teoría del fin de la historia. Más de uno se tragó ese sapo, a pesar de que el sentido común nos demuestra, con poderosa sencillez, que la historia nace de nuevo cada mañana.

Lo mejor de este asunto de vivir está en la capacidad de sorpresa que la vida tiene. ¿Quién podía presentir que los países árabes iban a vivir este huracán de libertad que están ahora viviendo? ¿Quién iba a creer que la plaza de Tahrir iba a dar al mundo esta lección de democracia? ¿Quién iba a creer lo que ahora puede creer ese muchachito plantado en la plaza durante días y noches, cuando dice: Nadie nos va a mentir nunca más?
Al fin y al cabo, cuando la historia dice adiós, o eso parece decir, ella nos está diciendo, o al menos murmurando: hasta luego, hasta lueguito, nos estamos viendo.
Y yo me despido de ustedes, ahora, que ya es hora, como la historia me enseñó, diciéndoles gracias, diciéndoles: hasta luego, hasta lueguito, nos estamos viendo.